Los negocios de comida, requieren de normas para prever al personal de los riesgos laborales restaurante. Aunque no es lo que se espera, es muy probable que por desconocimiento o descuido, ocurran accidentes en el área de trabajo que pudiesen poner en grandes apuros a los dueños de las empresas y la salud de los empleados.
Dentro de cualquier área de trabajos existen riesgos, y los restaurantes escapan de dicha realidad. El uso inadecuado de cuchillos, hornillas de gas, instrumentos filosos pueden lastimar a los involucrados, trayendo consecuencias latentes.
Por parte de los empleados debe existir el conocimiento de las posibles causas de los accidentes, esto con el fin de crear hábitos de seguridad que resguarden las instalaciones y la integridad personal. Para evitar incendios es recomendable hacer inspecciones frecuentes a los quemadores de la cocina y dar mantenimiento a tuberías y al sistema de alimentación de gas.
Al cocinar es común salpicar y derramar líquidos grasosos en el área laboral, lo que puede causar caídas inesperadas y con ello fracturas u otro tipo de lesiones, contusiones en la cabeza e incluso la invalidez total. Si se quiere evitar tales incidentes se debe mantener limpio el lugar, eliminando los residuos que caigan al suelo y usar calzado antideslizante preferiblemente mientras se está en la cocina.
Las quemaduras por contacto con superficies o líquidos son las más comunes de las lesiones que ocurren en un restaurante. El uso de guantes es indispensable y es prudente que supervisen los mangos de las ollas para impedir que se partan o doblen por el uso frecuente. La rapidez y presión de sacar los pedidos antes de que el cliente se impaciente es un factor que puede ser determinante a la hora de cocinar.
Por lo tanto, se debe tener precaución y establecer un plan de trabajo donde todo funcione armónicamente. Los restaurantes deberían establecer las medidas correctas de control y hacer partícipes a los empleados de la seguridad laboral. Es menos posible que ocurran accidentes si se conocen las causas y las consecuencias de los mismos.
Parte de la complejidad de un trabajo se mide por la cantidad de riesgos laborales presentes en medio de sus tareas. No obstante, si se evitan los problemas, más exitosa será la jornada. Recuerde que se debe contar con el asesoramiento adecuado, siendo la información precisa la vía de enlace entre el buen servicio y la calidad del mismo.
